Liviana como una pluma
El día se iba lento pero inexorable. Los atardeceres duran más de lo que uno acostumbra cuanto más se va hacia el sur. Paré con la casilla rodante en un buen lugar detrás del monte Zeballos, justo al borde de la meseta del lago Buenos Aires. Había fotografiado un mallín con nubes muy llamativas al…